La Embajada de China Popular en El Salvador aseveró que “el uso de visas como arma” no frenará los lazos entre China y los países centroamericanos.
“No ahuyentará a quienes tienen una mentalidad sobria. Tampoco frenará los florecientes lazos entre China y los países centroamericanos”, indicó la oficina diplomática a través de X.
La cuenta del portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China Popular aseveró que continuarán “fortaleciendo la cooperación con los países centroamericanos” y que contribuirán “a la prosperidad local” y a brindar “beneficios más tangibles” a dichas poblaciones.
China rechazó la política de restricción de visado a los centroamericanos que estén o se hayan vinculado con China Popular y señaló a Estados Unidos de tener una diplomacia al estilo de “intimidar a los pequeños”. “China deplora los ataques infundados de Estados Unidos, su diplomacia coercitiva y su injerencia en las relaciones de China con estos países”, indicó.
El jueves pasado, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, anunció una nueva política para restringir las visas estadounidenses a centroamericanos que trabajen o hayan trabajado con el Partido Comunista Chino, una política que también afectará a sus familiares.
“Estados Unidos se compromete a contrarrestar a influencia corrupta de China en Centroamérica y a detener sus intentos de subvertir el Estado de derecho… Como resultado, estas personas y sus familiares directos no podrán ingresar a Estados Unidos”, dijo Rubio.
La prohibición del ingreso a territorio estadounidense está dirigida a los centroamericanos que se encuentran en sus países y “actúen intencionalmente en nombre del Partido Comunista Chino” y “a sabiendas dirijan, autoricen, financien, brinden apoyo significativo o lleven a cabo actividades que socaven el Estado de derecho en Centroamérica”. También afectaría a los centroamericanos que hayan participado “previamente” en dichas actividades a nombre del Partido Comunista Chino para socavar el Estado de derecho en Centroamérica.
Los gobiernos de China Popular y de El Salvador restablecieron relaciones diplomáticas en agosto de 2018 tras romper relaciones con Taiwán; una de las donaciones más recientes fue la Biblioteca Nacional El Salvador (BINAES) y está por construir el Estadio Nacional El Salvador.
En febrero de 2025, el secretario Marco Rubio le "planteó" al presidente Bukele "estrategias para contrarrestar la influencia del Partido Comunista Chino en el hemisferio para salvaguardar la soberanía y los intereses de ambas naciones y la región" según su portavoz Tammy Bruce.