La conservadora Sanae Takaichi, del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), fue elegida este martes como la primera mujer en ocupar el cargo de primera ministra de Japón, tras imponerse en la votación parlamentaria celebrada en la Dieta, el Parlamento nacional.

Takaichi, de 64 años, obtuvo 237 votos en la Cámara Baja, superando por cuatro sufragios el mínimo necesario. El portavoz de la Cámara, Fukushiro Nukaga, oficializó el resultado que fue celebrado con júbilo por su bancada. En segundo lugar quedó Yoshihiko Noda, del Partido Democrático Constitucional (PDC), con 149 votos; seguido por Yuichiro Tamaki, del Partido Democrático para el Pueblo (PDP), con 28; y Tetsuo Saito, del budista Komeito, que obtuvo 24 votos tras abandonar la coalición con el PLD.

La victoria se ratificó posteriormente en la Cámara Alta, donde Takaichi derrotó a Noda por 125 votos frente a 46, confirmando así su investidura como jefa de Gobierno.

Su llegada al poder se consolidó tras alcanzar un pacto con el Partido de la Innovación de Japón (Ishin), nuevo aliado de coalición, con el que obtuvo el respaldo necesario para imponerse en ambas cámaras ante una oposición dividida.

“Desde que Komeito se retiró, hemos explorado la posibilidad de un nuevo marco de coalición con partidos con políticas cercanas. Ahora tomaremos medidas económicas para responder a la esperanza del pueblo de abordar la subida de precios”, declaró Shunichi Suzuki, secretario general del PLD y número dos de la formación.

Suzuki reconoció que el nuevo Gabinete deberá actuar con rapidez para atender temas económicos y diplomáticos, y anticipó que se buscará el diálogo con otras fuerzas políticas ante la condición de Gobierno en minoría. “Nos esforzaremos en buscar consenso y apoyo”, afirmó.

La elección de Takaichi se produce tras la dimisión de Shigeru Ishiba, quien dejó el cargo en septiembre luego de que su coalición perdiera la mayoría parlamentaria en ambas cámaras. Ishiba, que estuvo poco más de un año en el poder, fue sustituido tras unas primarias internas del PLD celebradas el 4 de octubre, en las que Takaichi resultó vencedora en segunda ronda.

La nueva primera ministra es considerada una figura del ala más conservadora del partido y se convierte en un hito histórico para Japón, al romper con una larga tradición de liderazgos masculinos en la política nacional.