El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, destituyó este lunes a Lisa Cook, miembro de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal (Fed), tras anunciar que será investigada por un presunto fraude hipotecario. La decisión se oficializó a través de una carta difundida en la red social Truth Social, firmada con el membrete de la Casa Blanca.
En la misiva, el mandatario invocó el Artículo II de la Constitución y la Ley de la Reserva Federal de 1913 para justificar la destitución: “Está usted eliminada de su puesto en la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal con efecto inmediato”, escribió Trump.
La medida se apoyó en una recomendación del director de la Agencia Federal de Financiamiento de la Vivienda, Bill Pulte, quien sugirió a la fiscal general, Pam Bondi, abrir una investigación penal. Según el informe, Cook habría firmado dos hipotecas como “residencia primaria” en diferentes estados en apenas dos semanas, lo que podría constituir fraude financiero.
Trump aseguró que Estados Unidos “debe poder tener plena confianza en la honestidad de los miembros encargados de supervisar la Reserva Federal” y sostuvo que la supuesta “negligencia” de Cook pone en entredicho su competencia como reguladora.
La gobernadora, nominada en 2022 por el entonces presidente Joe Biden, rechazó dimitir pese a las acusaciones. Afirmó que no cederá a la “intimidación” y que responderá con “información precisa” a cualquier cuestionamiento sobre su historial financiero.
Expertos anticipan que la destitución podría abrir una batalla legal, ya que un presidente de Estados Unidos puede remover a un miembro de la Fed únicamente por causa justificada, lo que suele implicar mala praxis comprobada o delitos, y no diferencias sobre política monetaria.
La salida de Cook se produce en medio de la creciente presión de Trump hacia la Reserva Federal y su presidente, Jerome Powell, a quien ha instado a reducir las tasas de interés para estimular la economía.