Los productores de cítricos se muestran preocupados por la entrada en vigencia de un reglamento que establece la destrucción de plantas que den positivo a la enfermedad del dragón amarillo de los cítricos o Huanglongbing (conocido como HLB).

El sector se encuentra en zozobra por el reglamento técnico que contiene los requisitos fitosanitarios para importación, producción, conservación, certificación, movilización y comercialización de plantas cítricos en viveros y sitios de producción. Dicho texto contempla su vigencia un año a partir de su fecha de publicación en el Diario Oficial, ocurrida el 11 de septiembre de 2024.

Para un viverista y productor de cítricos, que prefirió mantenerse en anónimo, uno de los mayores problemas del reglamento es una disposición que ordena “la tala por completo” de una zona de producción contagiada.

En efecto, en el numeral 6.4.2 del reglamento se establece la “destrucción de las plantas de cítricos” en caso que se confirme la presencia de la plaga Huanglongbing, así como exocortis, psorosis, virus Cachexia-Xyloporosis, leprosis, de la tristeza, clorosis, y cancro de los cítricos.

El productor, que se dedica al sector desde el año 2000, tiene un vivero de cítrico y una plantación de 16 manzanas de limón pérsico en Ahuachapán, donde asegura que es “es inminente” la presencia de la enfermedad HLB.

“Una acción de esas, como la plantea esa ley, no da una solución, porque no es de un país (la enfermedad)”, agregó el productor, quien recomienda un plan regional que integre a los países vecinos.

“A mí me pueden talar y destruir, pero el cultivo nuevo que voy a poner siempre se va a infestar porque estamos cerca, y Guatemala y Honduras no están tomando ninguna acción. Esto tiene que ser un plan método, regional, si se quiere seguir con la producción de cítricos”, dijo.

También se quejó de la falta de información sobre la implementación del reglamento, pues asegura que se ha acercado a las instalaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) sin obtener respuesta.

El MAG confirmó los primeros puntos de contaminación de la enfermedad Huanglongbing en febrero de 2020, precisamente en zonas fronterizas con Guatemala en los departamentos de Santa Ana y Ahuachapán, además de San Juan Opico, en La Libertad, y San Pedro Nonualco, en La Paz.

El HLB se transmite por el insecto vector Diaphorina citri kuw o cuando se realizan injertos de una planta contaminada. En ese momento, el MAG indicó que el área cultivada de cítricos rondaba las 14,000 hectáreas, con una cosecha de 90 toneladas métricas e ingresos para el sector por $15 millones.

Cuando un cítrico tiene esta enfermedad, los síntomas se reflejan hasta seis o 12 meses después del contagio, luego muere entre dos o seis años.