Estados Unidos estrenó el viernes los trenes de alta velocidad NextGen Acela, una inversión de $2,450 millones destinada a modernizar el transporte ferroviario en el corredor noreste del país, según informó la Empresa Nacional de Ferrocarriles de Pasajeros (Amtrak).
El primer convoy partió de Boston y llegó a la estación Unión de Washington D.C. tras recorrer 770 millas en siete horas, a una velocidad media de 110 millas por hora (177 km/h). Aunque está por debajo de los estándares de líneas en Europa, China o Japón, los nuevos trenes pueden alcanzar una velocidad máxima de 257 km/h, superando a sus predecesores.
Los 28 trenes NextGen reemplazarán gradualmente a los Acela, que tenían 25 años de funcionamiento. Según Amtrak, cada unidad permitirá transportar un 27 % más de pasajeros y ofrecerá una experiencia más cómoda y eficiente. El despliegue será progresivo y se completará en 2027.
El proyecto fue desarrollado por la francesa Alstom, que fabricó los trenes en sus instalaciones de Nueva York con componentes de más de 190 proveedores estadounidenses. La compañía destacó que la adaptación de la infraestructura existente en el corredor noreste representó “un desafío pocas veces visto” en proyectos similares.
Los precios de los boletos variarán según la distancia y la antelación de la compra. Un viaje de ida y vuelta en el nuevo servicio costará entre $130 y $190, informó Amtrak.
Con esta modernización, Estados Unidos busca fortalecer su sistema ferroviario y ofrecer una alternativa más eficiente de transporte en la región más transitada del país.