El emblemático Estadio Cuscatlán será este domingo el escenario de la gran final del Torneo Internacional 4 Naciones de Fútbol Americano, con las selecciones de Guatemala y Honduras luchando por el campeonato regional.

Este torneo, avalado por la Federación Internacional de Fútbol Americano (IFAF), se celebra en El Salvador desde el viernes y reúne a las selecciones nacionales de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, posicionando al país como un referente emergente en el fútbol americano en Centroamérica.

El Salvador va por el tercer lugar

En la primera jornada del certamen, Guatemala venció 14-6 a Nicaragua, mientras que Honduras derrotó 16-0 a El Salvador, que compite bajo el nombre de “Big Blue”.

A pesar del resultado adverso, la selección salvadoreña buscará el tercer lugar ante Nicaragua, mientras los catrachos y chapines disputarán la gran final en el Cuscatlán.

Cristian Serrano, jugador salvadoreño, valoró el impacto de este tipo de eventos: “Es un orgullo que El Salvador sea sede. Esto permite que el deporte crezca, que se rompan barreras y que podamos medirnos con otros niveles”, expresó.

El Salvador apuesta al crecimiento del fútbol americano

La presencia de Javier Alejandro L’Epíscopo, director continental de IFAF América, reafirma la importancia del evento dentro del plan estratégico de la federación para impulsar el desarrollo del fútbol americano en la región. “Los mejores equipos de 2026 y 2027 probablemente tendrán un lugar en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Estamos trabajando junto al COI para definir el proceso de clasificación”, afirmó.



Por su parte, Nelson Dimas, presidente de la Federación Salvadoreña de Fútbol Americano, subrayó que este torneo es el resultado de cuatro años de trabajo con federaciones vecinas. “La profesionalización en la región y el apoyo estatal, especialmente del INDES, han sido fundamentales”, dijo.

Dimas también destacó el crecimiento sostenido del fútbol americano en El Salvador, con avances como la consolidación de la liga local, la creación de una Liga Binacional con Guatemala y la expansión de academias y semilleros deportivos, pilares clave para el relevo generacional y la formación técnica con estándares internacionales.