El Chelsea FC ha vuelto a lo más alto del fútbol mundial tras proclamarse campeón del nuevo Mundial de Clubes de la FIFA y conquistar la Liga Conferencia de Europa el pasado mayo, firmando así una temporada que confirma su renacimiento futbolístico.
La transformación del equipo londinense comenzó en mayo de 2022, cuando la salida del ruso Roman Abramovic, forzada por sanciones del Gobierno británico, marcó el inicio de una nueva etapa. La llegada del estadounidense Todd Boehly y su firma de inversión Clearlake Capital supuso un giro radical. Adquirieron el club por $4,989 millones, en lo que fue la mayor compra de una franquicia deportiva en la historia.
Con ese respaldo económico, el Chelsea emprendió una profunda reconstrucción, apostando por el talento joven y reestructurando su cantera. La llegada del técnico italiano Enzo Maresca en junio de 2024 fue clave para consolidar este nuevo proyecto, después de una etapa turbulenta con Mauricio Pochettino.
“Solo tenemos que dejar que el proceso siga su camino y dar tiempo a los jugadores jóvenes para formar un equipo”, dijo Boehly en abril de 2024 en una entrevista con Forbes.Durante las últimas tres temporadas, el club invirtió cerca de $1,357 millones en fichajes, frente a ingresos por ventas de $575 millones, lo que dejó un gasto neto superior a los $782 millones. A pesar de estos números y una rotación constante de técnicos —cinco en tres años—, los títulos tardaron en llegar hasta esta temporada histórica.
El nuevo Chelsea se ha sostenido en jugadores clave como el ecuatoriano Moisés Caicedo, el fichaje más caro de la Premier League; el argentino Enzo Fernández, invicto en finales internacionales; y el inglés Cole Palmer, figura en la goleada frente al PSG. El brasileño João Pedro, recién incorporado, también aportó al título mundial.
En su camino hacia la cima, los ‘blues’ superaron a los principales favoritos y se convirtieron en el único club del mundo en ganar todos los trofeos de élite del fútbol internacional, si se incluye el renovado Mundial de Clubes como competencia de primer nivel.
A pesar de las críticas por decisiones polémicas, como retirar la ayuda de transporte a la afición, Boehly ha consolidado una visión empresarial agresiva que apuesta por el talento joven y la inversión estructural.
El Chelsea 2025 demuestra que con millones bien dirigidos y una base deportiva sólida, un equipo en crisis puede renacer. Con una nueva campaña por delante, Stamford Bridge vuelve a soñar con títulos, y con razón: el gigante dormido ha despertado.